29 de enero de 2009

Antecedentes de la Lucha Obrera


La Huelga de Cananea y de Río Blanco.

Desde principios de 1906 en Cananea también se había prendido el fervor revolucionario, Lázaro Gutiérrez de Lara, que sostenía relaciones epistolares con Ricardo Flores Magón y recibía el periódico Regeneración, organizo el "Club Liberal de Cananea", donde se propagaban ideas que no solamente eran contrarias al régimen de dictadura de Porfirio Díaz, sino que expresaban principios de transformación social profunda, influidos por los ideales del socialismo, que entonces aún no se había dividido por estas latitudes en socialismo autoritario y socialismo libertario, sino que se hablaba de reivindicaciones sociales inmediatas y de luchas encaminadas a la Revolución Social finalista.
En Cananea había descontento entre los trabajadores de la empresa norteamericana que explotaba las minas de cobre - The Cananea Consolidated Cooper Company - que pagaba unos salarios bajisimos y permitía que a los trabajadores se les tratara inhumanamente por parte de los empleados norteamericanos, especialmente por algunos capataces. La situación era cada vez más difícil y la tiranía en las relaciones entre obreros y patronos era cada vez mas critica. Al fin, como había de suceder, el día 1º de junio de 1906 comenzó la huelga.
El pliego de condiciones que presentaron a la empresa los obreros huelguistas - condiciones que el abogado patronal califico de absurdas - decía:

1. Queda el pueblo obrero declarado en huelga.
2. El pueblo obrero se obliga a trabajar bajo las condiciones siguientes:
La destitución del empleo del mayordomo Luis (nivel 19).
El mínimo sueldo del obrero será de cinco pesos, con ocho horas de trabajo.
En todos los trabajos de "Cananea Consolidated Cooper Co.", se emplearán el 75% de mexicanos y el 25% de extranjeros, teniendo los primeros las mismas aptitudes que los segundos.
Poner hombres al cuidado de las jaulas que tengan nobles sentimientos para evitar toda clase de irritación.
Todo mexicano, en los trabajos de esta negociación, tendrá derecho al ascenso, según se lo permithermanos Metcalf, desde un balcón arrojaron agua con una manguera sobre los manifestantes, quienes respondieron con una lluvia de piedras... y la contrarrespuesta fue un tiro que mató instantáneamente a un obrero. Se desencadeno entonces la lucha y los herman sus aptitudes."
William Green, gerente de la empresa, más que responder al memorándum, se preparo para atacar por la fuerza a los huelguistas. Armó a sus trabajadores norteamericanos y pidió refuerzos a las autoridades del otro lado de la frontera, las que no tardaron en enviarle parque y fusiles. En las primeras horas de la tarde se organizó una manifestación en la que participaron unos tres mil trabajadores, que desfilaron por las calles de la población y se dirigieron hasta la maderería de la Cananea Cooper para invitar a los obreros que todavía trabajaban a que se les unieran al movimiento, cosa que éstos hicieron inmediatamente, provocando este hecho la ira de los jefes norteamericanos. Los anos Metcalf y diez trabajadores resultaron muertos en el primer encuentro. La lucha se reanudó en más de una ocasión durante ese día y el siguiente. León Díaz Cárdenas, en su libro "Cananea primer brote del sindicalismo en México", describe así aquella lucha: "Los obreros, indignados, no podían repeler la agresión.
Inermes, contestaban a los disparos con maldiciones y con piedras, trabándose una lucha desesperada y desigual, como que de un lado estaban el gobernador de Estado de Sonora -mexicano-, Rafael Izábal, que, como es de suponer, estaba de parte de los patronos norteamericanos, que había llegado a Cananea con cerca de cien hombres armados, las autoridades locales, los empleados extranjeros de la compañía y 275 soldados norteamericanos, que llegaron al mando del coronel Rining, que había cruzado la frontera a petición del propio gobernador Izábal, del otro lado estaban los cinco mil trabajadores de las minas de cobre.
Hubo un tercer combate en el que nuevamente ofrendaron su vida los trabajadores, y, finalmente, perdieron los trabajadores, sometidos por las armas, por la amenaza que hiciera el jefe de las fuerzas represivas de enviar a los huelguistas a luchar en contra de la tribu yaqui y por el hambre, que se hizo insufrible.
Las cárceles se llenaron de huelguistas, los dirigentes fueron condenados a sufrir quince años de prisión en el castillo de San Juan de Ulúa, la espantosa cárcel donde el porfirismo enterraba a sus víctimas.
La huelga de Cananea fue el primer suceso de importancia capital en las luchas obrero-patronales, tanto por los ideales que se manifestaban en el proletariado, ideales de innegable esencia libertaria y anarquista, como por sus consecuencias inmediatas y la influencia que posteriormente había de tener en el desarrollo del movimiento obrero mexicano, prostituido por el liderismo politizado y gansteril. Los antecedentes inmediatos de la huelga de Río Blanco pertenecen, sin ninguna clase de dudas, a la propaganda magonista, que se había extendido considerablemente desde que apareció Regeneración, el 7 de agosto de 1900.
A mediados de 1906 se había creado en Río Blanco una "Sociedad de Obreros Libres". Bien pronto se fundaron círculos afines en Puebla, Querétaro, Jalisco, Oaxaca y Distrito Federal, los cuales reconocían al de Río Blanco como centro director. El órgano periodístico Revolución Social sostenía ideas inspiradas en los principios del programa del Partido Liberal de los Flores Mágon, principios radicales y de abierta y decidida oposición al régimen del general Díaz. Las opiniones revolucionarias del periódico alarmaron con sobrada razón a los capitalistas..."
Esa alarma de los capitalistas a que se refiere Silva Hersog se cristalizó en un reglamento por el cual se prohibía a los obreros que se organizaran, bajo la pena de perder el trabajo. Esta actitud patronal, unida a las represalias que ya se tomaban contra los trabajadores que más se significaban por sus actividades propagandísticas, provocaron la indignación de los obreros, que protestaron.
Como el conflicto que se iniciaba amanazaba la tranquilidad del país y representaba un ejemplo revolucionario ante el cual no podía permanecer impasible el régimen porfirista, el gobierno central intervino, y sus obreros y patronos sometieron sus querellas al arbitraje del dictador.
Pôrfirio Díaz, el dictador, dio un laudo - que fue hecho público en el Teatro Gorostiza, de Orizaba, con presencia de delegaciones de los trabajadores de las fábricas de Orizaba, Río Blanco y los alrededores el cual no era más que una serie de amenazas para los trabajadores y una suma de privilegios para los capitalistas. Don Porfirio, una vez más, afirmaba su posición al lado de los privilegiados. Los trabajadores, indignados, rechazaron el laudo presidencial y se decidieron a emprender una lucha sin cuartel contra sus explotadores y contra el dictador.
El día 7 de enero de 1907 no entraron los obreros a trabajar. Por distintos rumbos de la ciudad fueron apareciendo compactos grupos de trabajadores que se concentraron frente a la fábrica mostrando su firme decisión de huelga.
En esa actividad valiente no fueron las mujeres las menos decididas, y los nombres de Dolores Larios, Carmen Cruz, Isabel Díaz de Pensamiento y Lucrecia Tóriz han pasado a la historia como heroínas de aquellas jornadas. Cuando los trabajadores estaban congregados frente a la fábrica, en Río Blanco, los dependientes de las tiendas de raya cruzaron algunas palabras poco amistosas con un grupo de obreros. Menudearon las injurias y sonó un tiro. Un obrero cayó muerto. Alguno de los dependientes había disparado su pistola. En entonces la muchedumbre, indignada, se arrojó sobre la tienda de raya y, después de saquearla, la incendió. La muchedumbre, formada por hombres, mujeres y niños, enardecida y ansiosa de vengar la injusticia de su vida miserable resolvió marchar rumbo a Orizaba. Una fracción del 12º regimiento, mandada por el general Rosario Martínez, apostada en la curva de Nogales, al aparecer la multitud hizo fuego contra ella sin previo aviso ni intimidación. Después de repetidas cargas cerradas quedaron las calles sembradas de cadáveres de hombres, mujeres y niños. Durante el resto de ese día y parte de la noche los soldados se ocuparon de cazar a los pequeños grupos de obreros dispersos que huían para tratar de salvarse. La persecución fue despiadada y se extendió hasta las laderas que circundan la ciudad.
Hubo más de cuatrocientas víctimas y a la mañana siguiente, frente a los escombros de la tienda de raya, en Río Blanco, fueron fusilados Rafael Moreno y Manuel Juárez, presidente y secretario, respectivamente, del "Gran Circulo de Obreros Libres"" A otros militantes se les condenó a trabajos forzados en los insalubres y lejanos territorios de Quintana Roo. Los sucesos de Río Blanco como los de Cananea royeron los cimientos del sólido edificio de la dictadura hasta dejarlo en inminente peligro de derrumbe. Los ideales revolucionarios del movimiento obrero de influencias anárquicas habían arraigado la rebeldía justiciera en los obreros de Río Blanco, que pagaron su tributo de sangre a la Revolución Mexicana, esta revolución que en tan poca medida ha sido para los obreros.

Tomado de la revista "Tierra y Libertad" #245 Octubre de 1963- Méx. DF

Mundo Obrero

Conferencia sobre Marxismo en Cuba

El imperialismo de salarios bajos y el potencial de la lucha obrera

Teresa Gutiérrez y Fred Goldstein, del Secretariado del Partido Workers World /Mundo Obrero, harán presentaciones en la Cuarta Conferencia Internacional Sobre la Obra de Carlos Marx y los Desafíos del Siglo 21 en la Habana, Cuba entre el 5 y 8 de Mayo. Aquí publicamos parte de los escritos de Goldstein sobre la clase obrera de Estados Unidos. Ambos documentos pronto serán publicados completamente en Workers.org.

Este documento se está escribiendo al principio de una crisis económica capitalista. Nadie sabe a este punto cómo terminará. Pero nuestra tesis no se basa en esta crisis actual o en ningún acontecimiento específico. Es parte de una visión de conjunto de los profundos efectos que ha tenido sobre la clase obrera la reestructuración del capitalismo mundial que ha estado en marcha ya por tres décadas pero que se ha acelerado en los últimos 15 años o más.

Extremadamente importante para la clase obrera es el cambio en la división económica internacional del trabajo que ha emergido en las últimas décadas.

Por primera vez en la historia del imperialismo, los arquitectos de la economía del capital financiero mundial están lanzando a los/as trabajadores en los países ricos y privilegiados, región tras región, a competir directamente por salarios con los/as trabajadores en las áreas con salarios más bajos. Trabajadores/as de piezas de automóvil en Detroit compiten con trabajadores/as de piezas de automóvil en México. Trabajadores/as del servicio al cliente en Phoenix compiten con los/as trabajadores del servicio al cliente en las Filipinas. Las/os secretarios/as legales en Nueva York compiten con las/os secretarias/os legales en Bangalore. Las corporaciones transnacionales han creado una pugna mundial por los salarios en una carrera donde éstos van disminuyendo como en una espiral.

Además, millones de inmigrantes de América Latina, el Caribe, Asia y el Medio Oriente llegan masivamente a los EEUU huyendo de la pobreza impuesta por el imperialismo y están sujetos/as a trabajar por salarios bajos y explotación extrema con muy pocos derechos y protecciones. La inmigración es una parte integral de la globalización imperialista y juega un papel esencial en el impulso de la competición por los salarios entre los/as trabajadores.

El marxismo nos enseña que es el desarrollo de las fuerzas productivas lo que no sólo crea nuevas clases y destruye las anticuadas, sino que bajo el capitalismo, que está obligado a revolucionar constantemente los medios de producción, el carácter y las relaciones de las clases existentes experimentan transformación constantemente.

Los resultados de la alta tecnología y los bajos salarios

Desde los albores del capitalismo, la innovación tecnológica se ha dirigido a aumentar la productividad del trabajo, es decir, aumentando el índice de explotación de los/as trabajadores/as. La alta tecnología significa que relativamente menos trabajadores/as producen más productos en un tiempo dado a un costo más bajo para los patronos. Unido a este proceso está el refinamiento de la producción para incorporar las destrezas de los/as trabajadores/as en las máquinas y ahora articulados en los software, robots, etc. La tendencia histórica es la de reducir las destrezas del proletariado y así bajar sus salarios.

En los EEUU hay hoy millones de trabajadores/as con destrezas altamente desarrolladas las cuales ya no son necesitadas por el capital. Se han despedido a muchos/as pero hay muchos más que vienen de la nueva generación de trabajadores/as que se gradúan de universidad o de escuela secundaria con las destrezas y las especialidades que ya no son requeridas por la economía de bajos salarios. Los trabajos en el sector de servicios que han absorbido el exceso de mano de obra en los EEUU, no requieren grandes destrezas y la paga está cerca de los salarios de nivel de pobreza. Mientras que la GM era el empleador más grande de los EEUU con 600.000 puestos de trabajo seguro, bien remunerado y beneficios sindicales, Wal-Mart es ahora el patrón más grande de los EEUU con 1,2 millones de trabajadores/as sin beneficio sindical quienes trabajan por sueldos míseros.

Esta reducción de trabajos especializados está añadiendo a la competición mundial de salarios y está nivelando implacablemente el estándar de vida que va en descenso en los países imperialistas especialmente en los EEUU. Una nueva situación está amenazando, algo que los/as trabajadores/as no habían experimentado desde la Gran Depresión.

Las familias se han ajustado durante las últimas tres décadas trabajando en múltiples trabajos para suplir los ingresos perdidos. Los/as trabajadores/as han sido forzados/as a aceptar salarios más bajos y la reducción o la eliminación de beneficios; han aprendido a vivir con menos; se han sometido a duras condiciones de trabajo; se han mudado o viajado largas distancias para conseguir trabajos luego que fueran despedidos/as.

Los/as trabajadores/as han recurrido a cantidades sin precedentes de crédito y de préstamos para poder sobrevivir. La deuda personal de los/as trabajadores/as se ha utilizado para diferir crisis personales, diaria, semanal y mensualmente en millones de casos individuales. Ahora se ha transformado en una crisis de la clase en su totalidad y es parte de la crisis económica general del sistema.

En estos momentos millones de familias le hacen frente a la posibilidad de perder sus hogares. En los veinte años entre 1984 y 2004 más de 30 millones de trabajadores/as perdieron sus puestos de trabajo permanente en los EEUU. Solamente dos tercios pudieron encontrar nuevos trabajos y dos tercios de ellos/as trabajaron por menos dinero, con menos o ningún beneficio. La inseguridad está creciendo.

Mientras tanto, EEUU tiene la población más grande en prisión en todo el mundo, desproporcionadamente negros/as y latinos/as, y cada año está creciendo. La represión, la brutalidad policíaca y el racismo se utilizan para reforzar la creciente desigualdad social que mantiene los salarios y las condiciones de vida de los/as africanos/as americanos/as, latinas y latinos, asiáticos/as e indígenas, atascada en el fondo de la estructura económica capitalista.

Las consecuencias sociológicas de la economía de alta tecnología y bajos salarios fueron precisadas por Sam Marcy en 1985 en su libro “High Tech, Low Pay” (Alta Tecnología, Salarios Bajos”):

“Es este cambio altamente significativo de mejor pagado/a a peor pagado/a que está cambiando dramáticamente la composición social de la clase obrera, aumentando grandemente la importancia de la susodicha composición étnica de la clase obrera, es decir, el número de negros/as, latinos/as, de asiáticos/as, mujeres y otros grupos oprimidos, particularmente millones de trabajadores/as indocumentados/as.”

Este acontecimiento traerá a los/as oprimidos/as al liderazgo de la lucha de clases y le investirá la energía y la militancia que fluye de combinar las luchas contra la opresión nacional y la explotación de clase.

Hay importantes conclusiones políticas revolucionarias que se pueden extraer de estos acontecimientos. Hay un gran aumento de la clase obrera internacional sobreexplotada en los países oprimidos. Este proletariado que crece rápidamente está siendo organizando por la penetración y el crecimiento del capitalismo lo cual sienta las bases para las futuras luchas de clases. En el período anterior del imperialismo la exportación de capital sostenía la estabilidad de clase en los países imperialistas a expensas de los países oprimidos. En la fase actual, la exportación del capital está siendo utilizada por el capital monopolista para minar la posición económica de todos los sectores de la clase obrera en los países imperialistas. Esto está destruyendo la base material de la colaboración de clase entre el capital y los altos sectores del movimiento sindical y la paz entre las clases.

Estas presiones conducirán a una ruptura de la estabilidad actual y a un renacimiento de la lucha entre los/as trabajadores/as y personas oprimidas en los Estados Unidos que quebrantará la superficie de ideología reaccionaria y normas capitalistas y conducirá a luchas que no se han visto en los últimos 75 años. La opresión nacional intensificada, incluyendo la de los pueblos indígenas, y la opresión por sexo y género, están todas teniendo lugar dentro del marco de la creciente explotación de clase. Esto hará despertar la resistencia.

Hemos hecho este análisis no para quedarnos sentados/as y esperar a que llegue la revolución, sino para utilizar el marxismo como suponía ser utilizado, como una guía para un futuro revolucionario. Nuestro Partido está luchando con nuestros limitados recursos para estimular la lucha y para acercarnos a las masas en las primeras fases de la crisis que se avecina.

Estamos luchando por la solidaridad internacional de clase con los/as trabajadores/as desde la India a México que necesitan también de trabajos con buenos salarios. En la era de globalización, ésta es la respuesta a la competición mundial. Estamos luchando en defensa de los/as trabajadores/as inmigrantes, contra el racismo, la opresión nacional, contra la opresión sexual y de género como el único camino para conseguir la unidad de nuestra clase. Sobre esta base intentamos unirnos a todas las fuerzas antiimperialistas y comunistas en la batalla actual contra el capitalismo y en la fase próxima de la lucha para el socialismo mundial.